La desesperación del gobernador Gustavo Valdés ya no se disimula. Sin chances de reelección y con Vamos Corrientes cada vez más rechazado por los vecinos, ahora busca forzar un acuerdo con La Libertad Avanza para no perder protagonismo en la próxima elección. Y lo peor: quiere imponer a su hermano, Juan Pablo Valdés, como candidato
Sí, como si Corrientes fuera una empresa familiar, el gobernador pretende dejarle el sillón a su hermano. Pero ni en Buenos Aires se lo creen. En el entorno de Milei aseguran que no hay nada cerrado, y que las charlas con Karina Milei y «Lule» Menem son apenas tanteos. El libertario no quiere cargar con un lastre provincial en caída.
Mientras tanto, la gente en Corrientes está harta del modelo agotado de Vamos Corrientes, que no da respuestas, no escucha y solo reparte cargos entre amigos y parientes. Valdés lo sabe, y por eso intenta este manotazo de ahogado: pegarse a Milei y enchufarle a la ciudad a su hermano.
Pero todo indica que la jugada no le está saliendo. La ciudadanía quiere cambio real, no más acomodos. Y el apellido Valdés ya no tiene el peso que supo tener.-
Redacción Infoibera.
Fuente: Corrientes Hoy
