Cada 8 de octubre se celebra en Argentina el Día del Trabajador Rural, en reconocimiento a los hombres y mujeres que, desde el amanecer hasta la caída del sol, hacen posible la producción agropecuaria que alimenta al país y motoriza su economía
El origen de esta fecha se remonta a la creación del Renatre (Registro Nacional de Trabajadores Rurales y Empleadores), organismo que vela por los derechos laborales en el sector. Esta conmemoración busca poner en valor la tarea silenciosa y fundamental de quienes trabajan en el campo, muchas veces en condiciones adversas y lejos del reconocimiento público.
Desde la siembra y la cosecha hasta la ganadería, el mantenimiento de caminos rurales o el cuidado del ganado, el trabajador rural encarna valores de esfuerzo, sacrificio y compromiso con la tierra. En provincias como Corrientes, donde la actividad agroganadera es pilar de la economía, la figura del peón, del pequeño productor y de la familia rural sigue siendo símbolo de identidad y arraigo.
El Día del Trabajador Rural invita a reflexionar sobre la importancia de garantizar condiciones laborales dignas, acceso a la educación, salud y vivienda en las zonas rurales, para que el progreso llegue también a quienes viven y trabajan lejos de los grandes centros urbanos.
Porque detrás de cada alimento que llega a la mesa, hay una historia de trabajo, sacrificio y amor por la tierra.-
